miércoles, 12 de agosto de 2015

la peor educación

Los padres corren apresurados a condenar a los profesores por la educación de sus hijos, los gobiernos les echan el agua sucia, pero hoy me he sentido paralizado frente a un insistente pensamiento, hemos echado a perder por lo menos una generación, no es raro que adquiramos algunas arrugas, nos volvamos algo malvados, e incluso nos despersonalicemos, estamos criando criminales, gente que no quiere trabajar, que no le gusta el estudio, que se atreve a levantar la mano contra aquel que le lleve la contraria, una peste de cerdos intolerantes, inútiles y pendencieros, adoradores de las putas y los traquetos, la primera vez que le escuché a un niño decir que quería ser capo del narcotráfico fue en un colegio del ejército, a un niño de apenas 11 años,  "quiero ser narco" decía el, me horrorizaba la idea que a  alguien eso le pareciera una opción de vida.

Pero esta semana llego y una niña de séptimo de mi nuevo colegio ha sido acribillada, la mató su novio, un jefe de bandas criminales, y así han muerto bastantes, a los padres no parece importarles el destino de sus hijos,  algunos de esos acudientes vienen y roban en el colegio, o quién sabe si mandan a sus pequeños con el mercado de drogas para distribuirlo entre los menores, me cojo la cabeza y digo "el mundo se fue a la mierda"...


tenemos a estos pequeños criminales de mierda, andando en moto, comiéndose los pares y los semáforos, metiéndose en contravía y respondiendo a las justas quejas con "su madre hijueputa" no me sorprende nada, dentro de mi hay moral, que mierda de mundo es en el que ellos vivirán, si ellos como las palomas, todo lo llenan de caca, alzo mi voz de alarma, ellos necesitan corrección, no más flexibilidad con ellos, no más tratarlos como criaturas inocentes, malditos sean los políticos que nos imponen sus putas normas absurdas, ojala ellos se ahogaran en este mierdero que es la sociedad actual, ojala vivieran en un barrio pobre con el olor de marihuana y de bazuco todo el día en sus narices, y los levantara en la noche el estallido de las balas, el grito de auxilio que nadie escuchara, hijos de la gran puta, que han vuelto a este país, un país de mierda.